El Matarraña, también conocido como la «Toscana española», es el destino perfecto para una escapada de dos días. Esta comarca de la provincia de Teruel, en Aragón, combina paisajes de ensueño, pueblos medievales y una gastronomía que no te dejará indiferente. Si buscas desconectar y explorar un rincón lleno de historia, naturaleza y tradición, te aconsejamos que ver y como aprovechar al máximo tu visita de 48 horas.

Día 1: Historia y pueblos con encanto
Mañana: Valderrobres, la joya del Matarraña
Comienza tu viaje en Valderrobres, la capital de la comarca y uno de los pueblos más emblemáticos. Su casco histórico medieval te transportará a otra época.
- Castillo de Valderrobres: Explora esta impresionante construcción del siglo XII, situada en lo alto del pueblo. Desde sus terrazas, disfrutarás de unas vistas panorámicas espectaculares.
- Iglesia de Santa María la Mayor: Justo al lado del castillo, esta joya del gótico es una visita obligada.
- Paseo por el puente de piedra: Al cruzar el puente medieval, te darás cuenta de por qué Valderrobres está considerado uno de los pueblos más bonitos de España.
Tarde: Calaceite, encanto medieval
Tras almorzar en Valderrobres, dirígete a Calaceite, otro de los pueblos destacados del Matarraña. Sus calles empedradas y su arquitectura tradicional lo convierten en un lugar perfecto para perderse.
- Casco histórico: Pasea por sus callejuelas y descubre la plaza Mayor, rodeada de casas señoriales.
- Centro histórico: Visita el Museo Juan Cabré, dedicado al arqueólogo que dio a conocer el arte rupestre levantino.

Noche: Cena con sabor local
Termina el día con una cena en alguno de los restaurantes locales. Prueba platos típicos como el cordero a la brasa o los embutidos artesanales. Alojáte en un hotel rural como el Hotel Consolación o el Hotel del Sitjar, ambos con mucho encanto.
Día 2: Naturaleza y desconexión
Mañana: Senderismo en el Parrizal de Beceite
Dedica la mañana a conectar con la naturaleza en una de las rutas más icónicas del Matarraña: el Parrizal de Beceite.
- Ruta del Parrizal: Este sendero de unos 8 km (ida y vuelta) sigue el curso del río Matarraña y te llevará a través de espectaculares gargantas y formaciones rocosas. Asegúrate de llevar calzado adecuado y una cámara para capturar la belleza del entorno.
Tarde: Relax en La Fresneda
De vuelta, haz una parada en La Fresneda, un pequeño pueblo lleno de historia y tranquilidad. Este lugar es ideal para pasear por sus calles empedradas y visitar las ruinas de su castillo. Si buscas un almuerzo relajado, aquí encontrarás opciones encantadoras.

Actividad extra: Piscinas naturales
Si visitas el Matarraña en verano, aprovecha para darte un chapuzón en las pozas naturales de Beceite o en las Pesqueras del río Ulldemó.
Consejos para tu viaje
- Mejor época para visitar: Primavera y otoño, cuando el clima es más suave y los paisajes están en su máximo esplendor.
- Cómo moverse: La mejor forma de recorrer el Matarraña es en coche, ya que muchos lugares de interés están dispersos.
- Gastronomía: No te vayas sin probar el jamón de Teruel y los vinos de la zona. También puedes llevarte aceite de oliva local como recuerdo.
El Matarraña es un destino que, en solo dos días, logra enamorar a todo viajero. Con su combinación de historia, naturaleza y gastronomía, es el lugar perfecto para una escapada corta pero inolvidable. ¡Empaca tus maletas y descubre este rincón de Teruel que parece sacado de un cuento!
Alojamientos recomendados
Hotel Consolación:
Casa de las Letras:
Hotel del Sitjar: